Crónica del Sábado con Daniel

Bienvenidos sean todos. En primer lugar les pido una disculpa por no escribir nada desde hace una semana, lo que pasa es que tuve que salir de vacaciones y encontrar una computadora era tan difícil como encontrar un político honesto.

Pero ahora les voy a contar la reseña del sábado pasado en la cual, Daniel, Salvador, y yo, salimos a tomar unas cervezas, y terminamos por robar piñatas del mercado.

Pues todo empezó en casa de Daniel de donde salimos al “Liverpool” un bar en el centro de Texcoco donde hay una mesera que pa que les cuento. Empezando con una roda de cervezas, empezamos a brindar por mujeres, amistad, y política (Bola de borrachos). Después de 3 rondas de esa agüita que ataranta, empezamos con lo fuerte. Tequila. Ya con dos caballitos enzima pedimos la cuenta ($377), y tomamos valor para seguir pidiendo. En eso que llega un amigo de Daniel, Kalimba, y pedimos mas cerveza. (Para matar las últimas neuronas vivas) En eso al inteligente de Salvador se le ocurre decir: “¿y si nos vamos sin pagar?”. Y los no menos tarados de nosotros decimos: “VAAAAAA”.

A si que para empeorar la situación Daniel pidió una vaso de Vodka, y patas pa que las quiero. Nos fuimos en grupos de dos (divididos por sobrios y cobardes, por un lado alcohólicos y valientes por el otro lado) el primer grupo llego al centro de Texcoco (Daniel y yo) en donde empezamos a decirle de piropos a una chica en un antro, como a la media hora llego el otro grupo (Salvador y Kalimba), pálidos y agitados, ya que al parecer los iban correteando. Después de atrevida hazaña, Kalimba se separo del grupo: “Amigos de la Botellita”.

Ya quedando 3 de nosotros, decidimos que había que brindar por nuestra nueva hazaña, así que fuimos por más alcohol. En el camino nos robamos una piñata, orinamos las puertas del mercado, entre otras curiosidades. Y por fin llegamos a nuestro nuevo bar: “El ranas” donde nos negaron la entrada porque ya estábamos tomados (como se enteraron). Así que nos fuimos al bar de alado (que descaro), y tomamos un trago de vodka (y el cobarde de salvador, no quiso tomar más). Después nos corrieron de ahí porque ya tenía que cerrar, para no hacerla mas larga, fuimos a lo tacos para comer (apenas). Después de eso, en la calle empezamos a correr porque yo empecé a tocar timbres, ya para las 4 llegamos a casa de Daniel, y como mocos caímos a la cama.

Así que como consejo les puedo decir…




ARIBA EL DESMADRE!!!

p.d.: la foto no es de esta reunion